Julia Navarro: me gusta. Sus historias me cautivan, su
escritura es fácil … para mí, es una apuesta segura.
Lo recomendaría: si, advirtiendo del tema
Lo recordaré en un futuro: estoy segura de que sí, sobre
todo por el tema.
En cuanto al “Canalla”… la verdad, es que no le pega mucho
este tipo de historia y me parece realmente atrevido haber escrito este libro,
con un cambio de registro tan grande y con una historia tan desagradable. ¿He
dicho desagradable?... quería decir algo más fuerte, aunque no encuentro la
palabra.
Sin embargo, el libro me ha gustado… y mucho.
Realmente a la mayoría de los humanos nos resulta deplorable
escuchar, leer, ver… este tipo de conductas en otros seres humanos. El tipo es
malvado hasta decir basta, sin moral, ética o sentimientos, con una estructura
mental incomprensible desde el punto de vista de un humano. ¿O sí?, yo lo veo
desde mi estructura mental, con los valores que me han inculcado y con los que
he ido creando durante mi vida en base a las experiencias que he tenido; pero,
¿y si lo viese desde otro punto de vista?, ¿y si la maldad se lleva en los
genes?, ¿y si las experiencias vividas marcan tanto como para derrumbar la
ética y la moral aprendida?.
En el mundo existe mucha gente que es mala realmente, que se
regocija viendo al prójimo sufrir o que ni tan siquiera piensa en el daño que
está haciendo. Por ello existen las cárceles, la policía, los juzgados… otra
cosa es que tengamos tanta suerte, como la tengo yo, de vivir en un entorno sin
violencia… pero, lamentablemente, existe y más cerca de lo que nos podemos
imaginar.
Cuando empecé a leer el libro, pensé que el chico era
realmente malo. Y esa maldad la veía, de alguna forma, justificada; la envidia
de su hermano, la adoración por su padre y el distanciamiento emocional de su
madre. Con justificada no quiero decir que esté de acuerdo, sino que comprendía
que era la rabia interior que sentía la que le llevaba a actuar de esa forma. Y
todos sabemos que la ira y la envidia son pecados capitales que llevan al ser
humano a actuar contra otros seres humanos, incluso cuando esos actos dañan o
van en contra de uno mismo.
Avanzando con la lectura, llegó al momento crítico en la
carrera profesional de Tomás en el que se carga la vida personal de dos
políticos. En ese punto, el libro me hizo reflexionar más de la cuenta. ¿Qué
hubiese hecho yo?... La verdad, cargármelos. ¿Seré malvada?, ¿canalla?....
según el patrón del libro: sí. Sin embargo, yo lo justifico. Me los cargo
porque son unos hipócritas, un conservador, que ejerce como tal y quiere una
carrera política basada en la ética y la moral conservadora ¡no se puede ir de
putas!. ¡Y un demócrata vivir como un capitalista consumista por encima de sus
posibilidades!, pues tampoco. Insisto, me los cargo por hipócritas, igual que
me los cargaría si pudiese siendo un ciudadano. Pero, si además, me quito dos
competidores de en medio… seré malvada o canalla, pero con más razón me los
cargo. Pienso por un momento en que estoy destrozando dos vidas, dos familias…
no, pienso que eso lo tenían que haber pensado ellos antes.
Pues aquí me quede un buen tiempo. Sinceramente, con miedo
de avanzar en el libro, no fuese a ser que al final soy peor que el canalla….
La siguiente gran reflexión fue cuando está dispuesto a
hacer cualquier cosa por el gas de las tierras. Aquí me di cuenta que no soy
tan mala, yo nunca hubiese hecho nada por conseguir el gas, ni tan siquiera
hubiese engañado a nadie. Pero… lo extrapolé a los políticos que tenemos y a
las cosas que han hecho… ¡os podéis imaginar!. ¿Hasta dónde pueden llegar?,
¿realmente son muy diferentes al “canalla”?, ¿dónde se ponen el límite?,
¿tienen un límite?. ¿Y si a nosotros nos diesen la oportunidad de hacernos de
oro con un negociete así?, ¿qué haríamos?. Así, de pronto, seguro que la
mayoría contestaría “nada”, igual que yo. Pero, ¿si esta oportunidad no llega
de golpe?, si primero fue una cosita de poca monta, luego otra…. ¿qué haría la
mayoría de los humanos?...
En fin, un libro que me ha hecho reflexionar mucho y que
creo que puede ser la base de un gran debate y, por supuesto, de una estupenda
tertulia.
En cuanto a la trama y los personajes, creo que lo ha
clavado. Analiza el personaje desde cualquier punto de vista incluyendo a
personajes como Esther, Jaime, Susi, el padre, las chicas de compañía… y los
hace interactuar magistralmente con Tomás. Cada uno de ellos, permite al
lector, ver a Tomas desde distintos puntos de vista y analizar su conducta en
distintos ámbitos de la vida cotidiana. Podría hablar de cada uno de los
personajes y de las reflexiones que podíamos hacer sobre la relación con Tomás,
pero lo dejo para debatirlo con mis queridos amigos en la tertulia y para
invitar a aquellos que leen este blog de Juan Carlos a leerse el libro y a que
le escriban a Juan Carlos sus impresiones y opiniones.
Como conclusión, creo que es un gran libro en el que
describe a la perfección a un psicópata desde todos los ángulos posibles.